El marketing de contenidos es uno de los pilares de las estrategias de marketing digital, pero en realidad lleva siglos inventado… ¿Sabés quiénes fueron los primeros content marketers de la historia? Los periodistas.
Hoy en día, una agencia de marketing debe funcionar como la redacción de un medio, ojo: en el sentido de ofrecer contenidos relevantes y de valor a la audiencia. Por lo tanto, tenemos mucho que aprender de los periodistas «de toda la vida»… Empezando por estas 5 lecciones:
. Usemos el título y el copete para “vender la noticia”: dos factores clave para atraer la atención del lector y animarlo a seguir leyendo.
En el título y en el copete tenemos que conseguir un buen equilibrio entre atractivo y descripción. Queremos conseguir algo que impacte y enganche, pero también debemos ser fieles al contenido para no decepcionar. El copete debe funcionar como presentación del contenido a continuación, pero siempre podemos guardar algo de información para mantener la intriga.
. Definamos nuestro enfoque: en muchas ocasiones, los medios se distinguen entre ellos no por las noticias que seleccionan, sino por el enfoque con el que las presentan. Y lo mismo vale para nuestro marketing de contenidos.
Antes de sentarnos a redactar, debemos tener en claro qué vamos a contar y cómo vamos a hacerlo.
. La claridad ante todo: un buen periodista (y un buen experto en marketing de contenidos) no asume conocimientos avanzados en el lector. En lugar de ello, lo que hace es presentar los antecedentes de un tema de manera clara y precisa, para que el lector comprenda la situación y la información nueva.
El lenguaje también es importante, sobre todo cuando hablamos de leer en internet. En lugar de recurrir a florituras, busquemos la claridad con frases y párrafos breves y recursos como los apartados.
. Seamos concisos: los periodistas son unos maestros en el arte de controlar el número de palabras de un texto. En los medios impresos el espacio está estrictamente delimitado, así que tienen que introducir toda la información relevante en las columnas que les toque. Y la misma lección se puede aplicar al marketing de contenidos.
En internet el espacio no está limitado a priori, pero eso no quiere decir que debamos enrollarnos sin medida. El lector medio no dedica más de dos minutos a leer un contenido online, así que recordemos: menos es más.
. Una imagen vale más que mil palabras: en periodismo, una imagen puede hacer una noticia. Y en marketing de contenidos, también.
Ya sea con galerías de fotos, infografías o vídeos, añadir un elemento audiovisual a nuestros contenidos nos hará ganar muchísimos puntos para atraer la atención de los usuarios.
Al final, a través de los siglos y de los medios (escritos o digitales), hay una cosa que no cambia: crear un buen contenido requiere esfuerzo, dedicación y paciencia, pero los resultados compensan con creces.